El significado de los testigos de avería del coche
Autor: RACE
Un conductor habitual tiene que estar pendiente de otros conductores en el momento de salir a la carretera, pero también de la climatología, del resto de pasajeros del vehículo y sin olvidarse de las condiciones del asfalto. Cualquier imprevisto que se pueda ver tiene que estar controlado por el conductor pero… ¿Qué pasa con lo que sucede dentro del motor o bajo la carrocería?
Para dar respuesta a este último supuesto nacen los testigos de avería del coche. En una sociedad donde se cumple a la perfección la máxima de que una imagen vale más que mil palabras, los pictogramas de colores que tenemos en el panel detrás del volante cumplen una función tan importante que cualquier conductor debería conocer a la perfección el significado de todos y cada uno de estos símbolos.
Ahora bien, ¿todos los conductores estamos total y plenamente convencidos de conocer a la perfección el significado y uso de los testigos de avería del coche? Antes resultaba más sencillo, pero es que los coches también lo eran. Ahora un conductor no puede estar pendiente de la presión de las ruedas, del aceite, de los frenos, las luces, la batería, ABS, ESP, alternador, AdBlue… y todo eso sin olvidarse de lo fundamental: prestar toda la atención a la seguridad en la conducción.
¿Cuántos testigos existen en los vehículos?
No hay una respuesta absoluta ni general. Hay que tener en cuenta el año de fabricación del vehículo; si es diésel, gasolina, híbrido o eléctrico; y cuanto más moderno sea más innovaciones tendrá por lo que irá acompañado de más testigos. Para hacernos una idea, un coche moderno puede tener cerca de un centenar de testigos.
¿Qué significa cada testigo? ¿Cuáles son los más comunes?
Antes de continuar debemos tener claro que no existe una ley que obligue a todos los fabricantes a tener el mismo tipo de testigos de avería en el coche, por lo que siempre tenemos que mirar las instrucciones del fabricante para conocer todos y cada uno de los testigos y sus significados.
Lo que vamos a tratar de explicar es el significado general de los más habituales donde todos los testigos van a compartir color y una figura parecida, pero que la ubicación tamaño y forma puede variar de un modelo a otro. Así que, abróchense los cinturones y pongan atención a los testigos que tienen tras el volante que va a dar comienzo la explicación pormenorizada.
Sistema de control de gases de escape
Lo primero que tenemos que tener en cuenta siempre es el color, por lo que al ser de color amarillo sabemos que se trata de un problema leve pero que necesitará la ayuda de un profesional. Un fallo en el sistema de control de gases del escape indica que el motor está en modo de emergencia, es decir que notaremos una pérdida de potencia motora y que el vehículo no superará las 2.000 revoluciones por minuto.
La precaución siempre es una gran compañera para cualquier conductor y si el vehículo no muestra un comportamiento anormal se puede continuar la marcha hasta el Servicio Oficial más cercano, siempre que el vehículo no de tirones, mantenga una correcta temperatura del motor y podamos mantener una velocidad adecuada a la vía en la que nos encontramos.
Sistema de precalentamiento (motor diésel)
En primer lugar, tenemos que reparar en que se trata de un testigo de avería de color amarillo. Este testigo se puede encender tras conectar el encendido, pero pasados unos segundos debería apagarse. Justo entonces es cuando debemos iniciar el encendido del motor girando por completo la llave. Debemos ser precavidos y no arrancar el motor hasta que el testigo no desaparezca, porque si no el testigo indicará un problema en el calentamiento en el motor de combustión, por lo que habrá que realizar una reparación mecánica.
Si una vez que se ha iniciado la marcha el testigo comienza a parpadear indicará un fallo en el control del motor, por lo que la prioridad para el conductor, siempre que el vehículo permita la correcta marcha sobre la vía, será la de buscar un Servicio Técnico para reparar el vehículo.
Presión de inflado de los neumáticos
Al tratarse de un testigo de avería de color amarillo, se trata de un problema categorizado como leve, y que indica que uno o varios de los neumáticos del vehículo presentan una disminución de la presión de inflado.
La importancia de mantener los valores de presión de los neumáticos es fundamental para el correcto funcionamiento de un vehículo por lo que al encenderse este testigo se deberá proceder a identificar el o los neumáticos afectados y rectificar su presión.
Cuando el testigo de avería está parpadeando se debe a un fallo en el control de presión de los neumáticos, por lo que, si las presiones son correctas, entonces se deberá llevar a un Servicio Oficial para que revisen el sistema.
De manera excepcional se han dado casos en los que al desconectar la batería y volver a arrancar pueda aparecer encendido este testigo, con el trascurrir de los kilómetros el medidor de presión se regulará solo y el testigo se apagará.
Alternador
Entramos en los testigos más serios y a los que hay que prestar aún más atención si se nos encienden mientras estamos en marcha. Este testigo de avería lo que nos indica es que la batería del vehículo no se está cargando.
Ante cualquier testigo rojo que se nos encienda en el cuadro de mandos debemos proceder con cautela y parar el vehículo de una manera segura, para a continuación contactar con asistencia en carretera para que un técnico sea el que verifique la carga y haga una valoración de la avería.
En todo caso será el técnico y sus indicaciones las que deberemos seguir tras el análisis ‘in situ’, recomendando llevarlo a un Servicio Oficial cuanto antes y sin utilizar radio, aire acondicionado o cualquier consumible del que se pueda prescindir.
Si, además, durante el trayecto se le enciende el testigo (avería en el sistema de refrigeración) deberá para el vehículo en el acto de manera inmediata ya que podría dañar el motor.
Presión del aceite motor
Continuamos con los testigos de avería graves con el de presión baja del aceite, que al ser de color rojo nos indica que detengamos el vehículo lo antes posible, pero de una manera segura.
La forma de proceder para no causar cuantiosos daños en el motor es apagar lo antes posible el motor, porque si permaneciese encendido (aunque sea al ralentí) provocaría daños graves y de reparación muy costosa. Por lo que llamar a las asistencias pertinentes será la mejor de las opciones.
Nivel de aceite del motor
Bajamos el nivel de peligrosidad, pero con el mismo dibujo, el de una aceitera, pero esta vez de color amarillo. Este testigo de avería indica que el nivel de aceite del motor ha bajado, por lo que no tiene la cantidad suficiente que indica el fabricante.
Para poder solucionar este problema lo primero será estacionar el vehículo en un lugar seguro para después proceder a comprobar el nivel del aceite del motor, si nunca hemos tenido que hacerlo, en el manual del fabricante encontraremos una explicación detallada y completa de cómo llevarlo a cabo.
Si efectivamente el testigo de avería está en lo cierto y el nivel está bajo entonces procederemos a añadir aceite (nunca más de un litro), y tendremos que hacer comprobaciones cada vez que echamos más aceite para cerciorarnos de que el nivel de aceite termina siendo el exigido por el fabricante.
AdBlue
Al igual que el anterior testigo de avería, este nos indica un nivel bajo de AdBlue, por lo que se trata de un problema leve, pero que nos obligará a detener el vehículo de una manera segura para proceder a rellenar el líquido correspondiente.
Aunque en el cuadro de mandos veremos además la cantidad de kilómetros de autonomía que nos restarán para que se termine el líquido AdBlue, es aconsejable no agotar la distancia, ya que si lo hacemos el vehículo no arrancará.
Para la reposición del aditivo deberemos estar pendientes de las recomendaciones de cada fabricante, para saber los métodos exactos y los usos de mejores prácticas para proceder de una manera segura y efectiva.
Temperatura del líquido refrigerante
Es uno de los testigos más importantes para el buen funcionamiento del motor. Por eso, cuando se enciende se nos muestra con un color rojo para alertarnos de la posible gravedad del problema.
Este testigo nos puede estar avisando de un fallo en el sensor de la temperatura del líquido refrigerante, o de un sobrecalentamiento del motor por la ausencia de refrigerante o porque el nivel es muy bajo.
Si esto ocurre, lo primero que hay que hacer es detener el coche en un lugar seguro para comprobar el nivel del líquido y rellenarlo en caso de que fuera necesario. Si el motor está muy caliente, detén el motor y espera a que se enfríe antes de continuar el viaje. En el caso de que el testigo siga alertando de una anomalía, para de nuevo en un lugar seguro y avisa al servicio de asistencia.
Avería del motor
Cuando se enciende este testigo alerta al conductor de alguna avería o fallo en la gestión del motor, sistemas de inyección, encendido o escape.
Esta luz amarilla es de las más temidas cuando hablamos de testigos de averías, porque indica un fallo en el motor, pero no especifica cuál. Esta situación nos obliga a acudir a un taller profesional para que conectando el coche a una máquina de diagnosis pueda detectar la causa concreta.
Los fallos más comunes de los que alerta el testigo de avería del motor están relacionados con el sensor de oxígeno, filtro de partículas, catalizador, bujías, inyectores, tapa del combustible, termostato, bobinas de encendido, caudalímetro, válvula de control de emisiones o con el sistema de evaporación de emisiones.
¿Qué tengo que hacer cuando se enciende algún testigo de avería?
Lo fundamental es mantener la calma y saber hacer una primera lectura rápida de la gravedad del problema para saber ponerle remedio de una manera rápida pero que a la vez sea efectiva.
Para eso hay asociado un nivel de peligrosidad de la avería que se relaciona con los discos de los semáforos:
¿Todos los coches tienen los mismos testigos?
Cada fabricante cumple con unas prácticas habituales pero cada uno lo hace de una manera diferente. Si a esta circunstancia además añadimos la fascinante evolución de la automoción en los últimos 20 años nos daremos cuenta de la diferencia tan importante de la que hemos sido testigos (nunca mejor dicho). En la actualidad tenemos sistemas de seguridad que antes ni siquiera existían, por lo que los tamaños, diseños, formas y ubicaciones dependerán mucho del modelo, el fabricante y su modernidad.
Pero una cosa nos tiene que quedar clara, y es que debemos conocer el significado de los testigos de averías para disfrutar de una conducción segura, por lo que hay que revisar el manual de nuestro vehículo y conocer cada una de las peculiaridades de los testigos de avería de cada coche.